“Porque el cepillado solo no basta”
Estoy muy segura de que hemos escuchado esta frase muchas veces promocionando un producto dental, pues es muy cierta. Limpiar entre nuestros dientes es tan importante como cepillar las partes de ellos que vemos. Muchas veces pensamos que los cepillos, con tantas cerdas de diferentes posiciones y largos, son suficiente para limpiar cada rincón de nuestra boca; en realidad no es así. Las cerdas de los cepillos muchas veces no logran entrar entre los dientes, esos espacios estrechos y tan importante. Entonces ¿Cómo llegamos a estos lugares? Usando el hilo dental, ese que cada vez que visitamos el dentista nos preguntan si lo usamos y le decimos que para que no nos “regañen” o le prometemos que desde ese día en adelante lo vamos a usar.
Y tú, ¿Usas el hilo dental?
¿Cuál es la respuesta número 1 de las personas que no usan el hilo dental al preguntarles el por qué? “Me lavé los dientes, pero usar hilo dental me da un gran dolor o sangro”.
Hay dos razones por las cuales usar el hilo dental puede causar sangrado y/o dolor.
La primera razón, que es la más común, es que no tenemos el habito de usar el hilo diariamente y cuando por fin lo usamos ya tenemos las encías inflamadas y creemos que el sangrado y dolor lo está causando el uso del hilo, cuando en realidad lo está causando la falta de uso del hilo.
¿Qué es lo que queremos eliminar?
¿Qué es lo que queremos eliminar?
Okay, te digo que uses el hilo dental para limpiar entre los dientes, pero no sientes ni ves nada entre ellos. No necesariamente vamos a ver ni sentir nada entre los dientes, pero aun así hay que limpiar esa área. El cepillo se encarga de sacar la placa bacteriana (es una sustancia pegajosa y difícil de ver a simple vista) que se forma por todas las superficie de los dientes. Es esta placa la que queremos eliminar. Pero si es solo una sustancia pegajosa, ¿Qué de malo tiene? Sé que eso es lo que estas pensando. Con el paso de los días, la acumulación de esta placa se va poniendo dura gracias a los minerales que tiene nuestra saliva, y eso es lo que conocemos como piedra, sarro o calculo, esto es lo que queremos evitar. La acumulación de la placa y la formación de cálculo son las principales causas de la inflamación y sangrado de las encías.
- Hilo dental sin cera, es de nailon fino y se compone de filamentos trenzados. Se puede introducir en espacios pequeños si tienes los dientes muy juntos, pero se puede deshilachar o romper.
- Hilo dental con cera, de nailon estándar e incorpora una fina capa de cera. Aunque es más resistente, la capa de cera lo hace un poco más grueso por lo cual no lo recomiendo si tus espacios son muy estrechos.
- Cinta dental, es más ancha y plana que el hilo dental y está disponible con o sin cera. Es la más recomendada. Es fina y entra mucho más fácil en espacios estrechos, además de que es mas resistente.
- El hilo dental de politetrafluoroetileno (PTFE), este material se desliza fácilmente entre los dientes y es más resistente al deshilachado en comparación con el hilo dental normal.
- “Superfloss”, está hecho de un material parecido a la lana y se compone de tres partes. En la primera parte es fino y rígido, lo cual ayuda a que entre bien por el espacio entre los dientes. El medio parece una esponjita, ayuda a limpiar en espacios anchos y en espacios debajo de aparatos dentales fijos como coronas, puentes y bracers. Y el final es como hilo dental regular que ayuda a sacarlo más rápido de entre los dientes.
Independientemente del hilo que escojamos debemos saber la manera correcta de usarlo. Aquí la técnica correcta de cómo usar el hilo dental que escojas:
- Corte aproximadamente 18 pulgadas de hilo dental, y enrolle la mayor parte alrededor de uno de sus dedos medios.
- Enrolle el resto del hilo alrededor del mismo dedo de la otra mano. Este dedo hará pasar el hilo a medida que lo usa.
- Mantenga el hilo tirante (sin partes flojas) entre las dos manos, dejando una pulgada de hilo entre las dos. Guíe el hilo dental entre sus dientes usando un suave movimiento de sierra.
- Cuando el hilo dental llegue a la línea de las encías, haga una curva con forma de C con el hilo contra los dientes. Deslícelo delicadamente por el espacio entre la encía y el diente hasta que sienta resistencia.
- Para sacar el hilo desenrolle la del dedo que tiene menor cantidad y deslícelo hasta que salga por completo o con el mismo movimiento de sierra que lo entro sáquelo.
- Repita esta técnica en todos sus dientes, incluso los de atrás.
Nota importante: nunca, repito, nunca entre o saque a presión el hilo dental entre los dientes, esto puede ocasionar que lastime la encía y/o el diente.
Con tantas opciones de forma, textura y hasta sabor, espero que ya sepas cual hilo dental escoger y como usarlo. Comienza desde hoy a crear esa rutina de usar el hilo dental antes de dormir, pon el hilo en un lugar que lo veas para que no se te olvide y veras que en las próximas semanas ya lo harás de manera automática. Tú y tu dentista verán la diferencia.